La infancia de un abogado

El abogado pelea con el mundo desde la cuna. Se estira para alcanzar todo cuando ésta al alcanze del brazo, sobre todo si se trata de algo de valor. Sus gritos son mas fuertes que los de cualquier otro bebé que se encuentre en el pabellon de maternidad y alcanzan un tono más agudo. Sus habilidades vocales les ayuda a desarrollar una sensación de poder, una esfera de influencia. Las enfermeras lo colman con todo clase de atenciones.

En los años siguientes el continua depurando sus talentos magisteriales a la menor oportunidad. Al pelearse con sus compañeros, él confia más en su boca que en sus puños. Se queja en exeso y prefiere asumir el papel de la parte agraviada. Ya de adolecente empieza a actuar de un modo muy similar a un abogado auténtico. Es el desarrollo natural de un prospecto de abogado que comienza a usar lo que la naturaleza le brindó.

stephen Baker Editorial Selector